26 de julio de 2012

Hoy encontré este escrito pre-entrada del mes de Abril que había quedado olvidado entre muchos archivos de la computadora...



Hace una semana que no hay luz en casa, hace una semana que para mi el día termina a las 22. A las 7 menos cuarto uno ya empieza a prender las velas y a sacar los juegos de mesa para mantener bajo control la ansiedad hasta comer, lavarse los dientes e ir a dormir.
Es jueves, 20.49.
Prendo la netbook, que cargue esta tarde en una cafetería de Corrientes.
21.30. Ya mire algunos videos que descargue hoy para entretenerme un rato cuando las velas no alcanzan ni para jugar al ajedrez con el abuelo...
Después de descartar la segunda temporada de Dexter y a Feinman y su fascinación por la filosofía, me pongo a revisar la Carpeta de imágenes.
Como preparando el terreno para no sé qué, suena Adele- Someone like you (mi tema del mes) de fondo.
Encuentro un archivo que no recuerdo que tiene:
 fotos.zip
Lo abro.
_DSC0047 Abro.
"Ay bonito" primerísimo plano de una nariz y unos ojos, su nariz... perfecta y sus ojos saltones.
Abro de a una las fotos, rápido, como si quisiera ver esas que mas me gustaban de la serie. Me salteo un par que se que no me van a interesar porque el objeto soy yo.
_DSC0079 Abro. Son estas. Observo. Es una foto que solo alguien para quien la función manual de una reflex queda enorme podría sacar: subexpuesta, fuera de foco, que rompe con toda regla de composición...
_DSC0082 Abro. Sonrisa. "Qué me importa la técnica, mira esta foto..." Sonrisa...
Me gusta así...
_DSC0083 Abro. y así mas
_DSC0086 Abro. y así
...
Y me permito extrañar... como hoy al mediodía, cuando buscaba algún lugar para almorzar.

Cierro.


Tiempo después, me doy cuenta de que aunque todo haya pasado, aunque hoy seamos otros, tengamos distintos intereses, estemos caminando nuevos caminos, hayamos aprendido a estar mejor con lo que tenemos (toda nuestra vida y juventud); hay algo que nunca va a cambiar, y eso es lo felices que fuimos en aquel momento. Siempre nos vamos a tener a nosotros amándonos, riéndonos, descubriéndonos en aquel momento. Y algo queda, algo quedó, va a haber siempre una parte de nosotros que es el otro. Eso a mi me encanta y es lo que elijo conservar.

Fin.

No hay comentarios: